miércoles, 5 de noviembre de 2008

Revisiones taxistas y palos a la cuenta

Ayer estuve pasando la revisión del coche, exactamente no se cuál era porque mi coche tenía 88.000 km y una es a los 100.000 y otra a los 80.000 creo o algo así me dijeron. Pero como las empecé a pasar mal desde la primera pues así me va. El caso es que tuve que dejar el coche allí todo el día, además les dije que me cambiaran el reglaje de la luz de cruce que me dijeron que estaba puesto al revés en la ITV... vamos que me jodieron pero bien por una luz. Pues dejé el coche allí y me fui al metro de Torre Arias, allí saqué mi Ipod y mis cascos enormes, pero que son de tamaño proporcional al sonido que regalan... me senté mientras escuchaba a los míticos Rolling... escuchar a los Rolling con los cascos Sennheiser es un placer de los dioses. El metro iba bastante lleno, eran las 8 de la mañana así que era lógico... se sentaron al lado mío dos niñas que debían ir al instituto o al colegio, con el ojo pintado hasta la oreja y miles de complementos oriles en el cuerpo, mientras con su móvil escuchaban algo que no merecía la pena que bajara mi música para oírlos, por si no lo sabéis mis cascos aíslan del mundo, aún sin música puesta no se oye casi nada del exterior. Bueno el caso es que las dos espantajas de los melones me han mirado los cascos, se han mirado entre ellas y se han empezado a reír. Yo que soy una persona muy educada simplemente he pensado... pobres niñatas carne del pavo que tenían... de qué se estarán riendo estas dos que bastante tienen con lo suyo...ir escuchando música en el móvil porque no tienen nada mejor de que hablar entre ellas...viva el sonido a lata.... y algún que otro pensamiento que ahora mismo no recuerdo ni quiero dar más importancia. En el otro extremo de la fila de asientos había una chica de unos 30 y algo años, con guantes con los dedos recortados, una cinta en el pelo, llena de mierda, la cinta y el pelo, ambos, y luego unas Converse dobles último modelo, si no fuera por este úlitmo detalle la mujer podría haber pasado precisamente por una homeless. Bueno pues el caso es que ella estaba dormiday así seguía. De repente cuando íbamos llegando a mi estación todo el mundo se ha girado hacia ella. Yo como iba aislado no me había enterado de lo que pasaba. Al rato he mirado y he visto que estaba llorando
. Hábría como unas 12 personas mirando a la mujer, algunos desde hacía rato y nadie era capaz de acercarse e intentar animarla. Las dos niñas mientras seguían a su bola riéndose de cualquier tontería. Yo tampoco me he acercado, he estado a punto de hacerlo pero la pasividad de los demás me ha quitado todas las ganas. Entonces he pensado, joder a que límites estamos llegando, una pobre chica llorando a saber por qué y ninguno somos capaces de hacer nada por ella. Igual suena un poco a ONG pero de verdad me he sentido muy mal. Si alguna vez me vuelve a pasar seguro que no actuaré así. Al poco ha llegado el momento de hacer el transbordo. Me he bajado del metro y el resto de los que se bajaban salían a cascoporro por otras dos puertas. Qué casualidad, las puertas que estaban al lado del pasillo de salida. Lo que tiene conocerse el metro eh. Total que me he recorrido todo el pasillo mientras sonaba esto...



todavía recuerdo el día que mi padre montó conmigo en el coche y sonó esta canción. Me dijo que ése había sido el primer vinilo que había tenido él. Lo escuchaba día y noche porque en esas épocas no había dinero para comprarse más. A mí me hubiera gustado también que mi primer disco hubiera sido ese, que buena manera de comenzar no? Siempre me ha gustado la música que ponía mi padre en casa o en el coche, que buen oído tiene. Había algunos que antes no me gustaban mucho pero con el tiempo me han ido encantando.
A lo que iba, estaba andando por los pasillos del metro, para coger la línea circular...y he llegado a un tramo que se bifurcaba y había un cartel a cada lado...
Andén 1
Andén 2
muy bien, bravo por el que puso los carteles...pero, se podría haber acordado el hijo de su madre de haber puesto uno donde explicara que estaciones eran las que se cogían en cada andén... decidí ir a por el dos y tuve suerte porque unos 30 metros mas adelante un cartel explicaba la ruta, había acertado! Bien por mí!
A la tarde después de currar llamé al taller y me dijeron que mi coche ya estaba pero que cerraban el taller en media hora. No me daba tiempo a ir en metro así que cogí un taxi. Me senté allí y le pregunté al taxista que como le iba la tarde... bueno fue preguntarle eso y me enteré de toda su vida, en 10 minutos de taxi supe que:
-estaba divorciado y con una hija y dos hijos
- la hija tenía 24 años y desde los 15 a los 17 había estado enteletando por ahí, tan pronto se enchufaba al frasco como le tiraba a los palomos.
-los hijos habían salido más tranquilos.
- el ex novio de la hija se había sentado un día en SU sofá y le había montado un pollo el taxista al chaval...
-actualmente el hombre vivía con su novia que era enfermera.
-se queria comprar un Xsara Picasso.
-le gustaba beber gin-tonic y no caseras cuando salía a cenar...
había más cosas pero no es plan de contarlas todas. En resumen que llegué al taller y .....450 pavazos de revisión... 60 euros de mano de obra por cambiar una bombilla y un antiniebla que se tardaba 10 segundos... para todo lo demás Mastercard. Más los 20 euros de taxi claro está. Con las luces cambiadas y todo OK hoy he ido a la ITV, vaya manera de hacer el capullo, 40 minutos para llegar, me ha mirado la jodida lucecita y hala, apto. Y el tío el otro día no me dejó cambiarla allí, manda huevos.
Bueno otro día sigo que hoy ...hoy mejor no...además ya llevo una tirada.

Besitos abrazos y unas friegas

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